En el pueblo de San Bernabé, parroquia de Santa María Nativitas, sucedió que yendo a una procesión un indio de unos 16 a 17 años, casado, piadoso, de nombre Diego Lázaro de San Francisco, se le apareció en forma totalmente privada el arcángel San Miguel, y le habló con estas palabras:
La segunda y más grandiosa aparición, aconteció la noche del siete al 8 de mayo de 1631. Debido a su desobediencia, le sobrevino Diego Lázaro una grave enfermedad, un mortal cocolixtli (El cocoliztli en español "enfermedad, mal", fue una enfermedad que afectó a los nativos de la Nueva España, tras la llegada de los conquistadores españoles) , que lo puso a las puertas de la muerte.
Pasado algún tiempo, Lázaro se fue a la fiesta de San Diego de Alcalá *, que es el 13 de noviembre. Durante la misa, tuvo una experiencia mística muy dolorosa: Sintió que una mano invisible lo apaleaba fuertemente hasta dejarlo descoyuntado, teniendo que volver a su casa muy enfermo.